Mi cuento

Vivo en un cuento te princesas, en el que mi vestido no es rosa, en el que no tengo que estar a las 12 en punto de la noche en mi castillo, si no a las 11 como mucho si no pierdo la carroza. En mi mundo de princesas mi príncipe no es azul, ni verde, ni de colorines, porque no es ni un pitufo, ni un ogro y mucho menos un oso mimoso de esos. Mi mundo no es de color rosa, prefiero pintarle de colores, con pinturas de madera. En el que en cada capitulo de mi cuento la bruja quiere ser buena. Pero mi cuento de pricesas sigue y avanza, el príncipe de color indefinido se medio independiza y todos los días sale de paseo con su caballo de buena raza, viviendo cada minuto del día al máximo  sin dejar que el cuento termine. Todos los días la princesa y el príncipe se miran a los ojos sin cansarse nunca de decir te quiero. No se mucho mas de esta historia, porque solamente voy por la pagina 11 y parece un cuento sin final en la cual, cada pagina vieja se renueva contándonos otras cosas diferentes a las ya pasadas, con el fin de que esta historia nunca termine, y que solamente puedan leerlas totalmente, dos personas, el príncipe y la princesa. Parece un cuento infinito, de esos que son eternos pero enganchan, de esos cuentos que no tienen paginas aburridas, pero si tienen dibujos, son de esos cuentos que te gusta recordar cada noche, de los que todas las niñas quieren ser las princesas, y todos los niños aquel príncipe caballeroso que siempre consigue a su princesa, la conquista y viven miles de historias bonitas. Y así es mi historia, eterna, divertida, romántica y... bueno, si quieres saberlo tendrás que ser alguno de los dos personajes que leen el cuento, si no, jamas sabréis el final.