No sé si me sigues gustando o me niego a pensar que esto está sucediendo. Fue poco tiempo. Empezaste a marcharte pero a veces parecía que te querías quedar. Ahora creo que no estás... Pero en mi mente cuando no me doy cuenta, apareces y me enfado. Y no quiero que estés, pero tampoco quiero que te vayas. Cómo explicártelo... es como si te quisiese a mi lado pero tuviera ganas de correr hacia otro sitio.
No hay comentarios:
Publicar un comentario